Bichos: pequeña gran joya

noviembre 15, 2018




Corría 1990 cuando Hollywood vivió uno de los momentos más esperpénticos de su historia. Poco tiempo atrás, se había producido la ruptura profesional y personal de Menahem Golan y Yoram Globus, los 2 primos israelíes que en los 80 habían sido los reyes de los videoclubs con la saga Yo soy la justicia, El guerrero americano, Delta force y demás títulos de serie B que producía Cannon Films. Ambos se empeñaron de inmediato a sacar adelante antes que el otro su última idea: una película sobre el popular baile de la lambada. Finalmente ambas películas (Lambada, por parte de Cannon, y Lambada: El baile prohibido, de 21st Century Films, la nueva productora de Menahem) se estrenaron exactamente el mismo día (16 de marzo), resultando sendos fracasos de taquilla.


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¿Qué tiene que ver esta historia con Disney? Pues veréis: en 1994, Jeffrey Katzenberg (que había sido uno de los máximos impulsores del acuerdo con Pixar) abandonó la compañía debido a sus graves diferencias con el entonces CEO Michael Eisner (al que quizá recordéis de Padre de familia) . De esta forma, se asoció con Steven Spielberg y el productor musical David Geffen fundando Dreamworks.



Y, en cuestión de pocos meses (entre 1998 y 1999), se estrenaron 2 películas muy parecidas entre sí y a la vez enormemente diferentes: Antz (hormigaz) y la que nos ocupa: Bichos, una aventura en miniatura.

Pixar ha tenido 2 etapas en su trayectoria: una primera de contínuos éxitos de crítica y público, y otra (desde su absorción definitiva por Disney en 2006, ya con Bob Iger sustituyendo al polémico Eisner) más irregular pero no menos rentable. Y en medio de todo esto, ya sea porque la cinta de Dreamworks ha acabado teniendo tras una tibia recepción inicial un cierto seguimiento de culto, o por la enorme sombra de ser la película siguiente a Toy Story (el origen de todo) Bichos ha caído casi en el olvido. Pero, ¿es justa esa situación?

El saltamontes loco se saca para usarlo, el que lo saca para enseñarlo es un parguela

Yo desde siempre he sentido más interés en las películas por los antagonistas. Y en el caso de Bichos, teníamos a un villano de altura: Hopper, un saltamontes que obliga a la colonia de hormigas de "Isla hormiga" (sí, no pensaron demasiado el nombre) a recolectar comida para él y los suyos durante el verano, sin importar que ellas no tengan suficiente. ¿En qué se diferencia de otros malos de Disney? En sus motivaciones. 



Algo típico en todo film de estas características es que el malo de turno infravalora al prota, y esto acaba siendo su perdición. Pero Hopper no. Él es plenamente consciente que las hormigas les superan ampliamente en número, y eso es lo que precisamente le lleva a un hostigamiento cada vez más constante, el que no lleguen a ser conscientes de ello, sobre todo después de ser por primera vez desafiado por el protagonista, Flik. Esto le vuelve especialmente maquiavélico.

Si hemos tenido 3 partes de Cars, quiero al menos un corto de este tipo como previa de Toy Story 4

También los secundarios son especialmente carismáticos, destacando especialmente el grupo de "héroes" que recluta Flik, que resultan ser un grupo de artistas de circo fracasados dirigidos por una pulga obsesionada por ser rica.



También esta segunda película de Pixar marcaría el inicio de algo habitual en la marca del flexo: los guiños a sus otras historias (como en este caso un vaso de Pizza Planet en el basurero que representa "la gran ciudad"), lo que ha creado todo tipo de teorías sobre una supuesta conexión entre ellas, por lo que transcurrirían, como Marvel, en un mismo universo, algo que a día de hoy no ha sido desmentido ni confirmado. Por último, el final (que no spoilearé por si alguien aún no lo ha visto) me daba algo de miedo en su día, y resulta una gran escena a la altura de aquellos grandes villanos de la edad de oro de Disney.

Quizá nunca tendremos un Bichos 2. Pero era de mis películas preferidas de la infancia, y volver a verla en la actualidad me ha hecho valorarla aún más. Dedicado a la memoria de Menahem Golan.

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